EUROPA PRESS
30 enero 2012
Cuando visualmente
somos conscientes de que tenemos menos pelo ya hemos perdido el 50%
El coordinador médico de Svenson,
Juan Carlos Vázquez, ha advertido de que "cuando visualmente somos
conscientes de que tenemos menos pelo ya hemos perdido el 50 por ciento" y
por eso ha aconsejado "estar pendientes de ciertos signos como encontrar
cabellos en la almohada, el lavabo o el peine cada mañana, por ejemplo, o
perder densidad, notar entradas y escasez de cabello en la coronilla".
Cuando
se observen estos síntomas, el especialista ha señalado, en declaraciones a
Europa Press, que, en primer lugar, hay que acudir a
un especialista ante los primeros síntomas "para que sea quien evalúe el
caso y recomiende la solución más adecuada".
Como
medidas generales, ha propuesto lavarse la cabeza diariamente con productos de
calidad, cepillarse el pelo dos veces al día, evitar el uso abusivo de
secadores de pelo, evitar el uso frecuente de planchas de alisado, "usar
tintes de cabellos sin amoníaco, preferiblemente las mujeres que desean
realizarse un tratamiento de queratina, y evitar la técnica japonesa ya que
esta resulta más agresiva para el cabello".
Además,
ha indicado que hay que tener una dieta de alimentación equilibrada, dejar de
fumar, si se tiene este hábito, practicar deporte y leer. Según un estudio de
opinión de la compañía de salud capilar Svenson, el
18,8 por ciento de los aragoneses padece alteraciones del cabello. En el caso
del hombre, el 90 por ciento suele tratarse de alopecia androgenética,
lo que conocemos como calvicie común. En cambio, en el caso de la mujer suele
ser el 30 por ciento.
Por
eso, "la caída del cabello en la mujer se puede considerar como una
manifestación de una enfermedad en muchos casos, por lo tanto es recomendable
que ante los primeros indicios, acudan a un especialista para que evalúe el
caso y recomiende el tratamiento más adecuado".
Causas
Las
causas que originan la caída del cabello, difieren dependiendo del sexo, ha
explicado el coordinador médico de Svenson, Juan
Carlos Vázquez. Así, en los hombres, la alopecia androgenética
es la más común.
En
el caso de la mujer, son más frecuentes las debidas a la patología tiroidea
(hipo e hipertiroidismo), ansiedad, depresión, estrés, deficiencias nutricionales
como consecuencias de dietas desequilibradas (dietas milagro), déficit de
hierro, postparto, fiebre elevada, secundarias a
cirugías importantes, trastornos de ciclo menstrual, hábitos (fumar, uso
excesivo de secador del pelo, planchas o tintes), entre otras cosas.
Los
principales remedios para afrontar la caída del cabello, según el médico de Svenson, son "la combinación de medicamentos, Minoxidil y/o Finasterida, con un
tratamiento cosmetológico adecuado se ha demostrado
como una de las soluciones más eficaces contra la alopecia masculina".
En
el caso de la mujer, el Finasterida y los
antiandrógenos "solo pueden ser utilizados en ocasiones muy
puntuales". Esto, "unido a la diversidad de causas que pueden
provocarla, ha llevado a numerosos avances en este campo y hoy en día la mujer
puede encontrar muchas soluciones a sus problemas capilares, desde tratamientos
médico-cosméticos a sistemas de integración capilar".
Ha
agregado que "la capacidad de regenerar pelo, depende única y
exclusivamente de que el folículo se encuentre dañado, es decir esté
completamente atrófico y por ende ya no exista. En este caso lo único realmente
eficaz es el microinjerto de pelo".
Otros datos
La
encuesta refleja que el 57,5 por ciento de los aragoneses están preocupados por
quedarse calvos. De estos, el principal motivo (46,4 por ciento) es la
percepción de envejecimiento que puede provocar la caída del cabello. Además,
al 31,2 por ciento les preocupa el hecho de que les pueda otorgar un aspecto
menos saludable.
Asimismo,
al 11,5 por ciento les hace sentir menos seguros de sí mismos. El resto de los
entrevistados relaciona su inquietud con la posibilidad de ver reducido su
triunfo profesional o el éxito con la pareja.
Ante
la aparición de un problema de pérdida de pelo, el 82,3 por ciento de los
aragoneses recurre mayoritariamente a la visita de un especialista, mientras
que tan solo el 2,5 por ciento experimenta con remedios caseros. El tres por
ciento respondió que acude principalmente a los consejos de familiares y amigos.
A
nivel nacional, se subraya la temprana edad en la que la muestra afectada
comienza a padecer problemas capilares, pues el 48 por ciento los presenta
antes de cumplir los 30 años.
Los
datos de este estudio también reflejan cuáles son los problemas más comunes
entre la población española: la caspa (15,3%) y la grasa (15,2%), seguido de
la caída del cabello (8,3%). Tanto
hombres como mujeres siguen esta tendencia, pero ellas se ven más afectadas por
problemas de pérdida de volumen y el 18% de los hombres sufre caída del cabello
o calvicie.
La
encuesta se realizó entre más de 2.000 personas de toda España a través de
entrevistas telefónicas realizadas por TNS-GLOBAL, de
los que el 3,5 por ciento pertenecían a Aragón. Todos ellos forman parte de una
muestra representativa dentro de una franja de edad de entre 15 y 75 años,
siendo un 49,8% mujeres y un 50,2% hombres.